Quiénes somos

Creaciones Ana es una tienda de ropa infantil la cual, tras 48 años desde su apertura, sigue otorgando la misma confianza a sus clientes y apostando por la calidad-precio que siempre nos ha caracterizado.

En 1975 Mari Carmen abrió esta tienda queriendo proyectar en su nombre comercial la empresa familiar, fundada por sus padres en los años sesenta, dedicada a la fabricación de ropa para bebés y niños. Además de materializar las creaciones de sus padres. Por lo tanto, nuestra actividad comercial se inició conociendo todo el proceso de fabricación y todas las exigencias, gustos y tendencias de este sector en cada una de las temporadas.

Tras el paso del tiempo, el establecimiento ha sabido, mediante reformas y acondicionamiento del local adaptarse a las exigencias que el público ha demandado en todo momento.  Por lo que, generación tras generación, Creaciones Ana ha vestido a los bebés, niños y niñas de toda la zona generando en sus madres y padres fidelidad y confianza por nuestras prendas y asesoramiento.

Consideramos que la clave de nuestro éxito ha sido, además de la constancia y el buen conocimiento de nuestra clientela, los precios. Siempre competitivos, han sido decisivos para defender nuestra existencia por encima de toda la competencia que habitualmente ha ido generándose. Otorgando como atractivo principal una venta con precios de fábrica lo que generó una constante y repetitiva asistencia de gran cantidad de madres y padres en busca de las tres constantes principales en este tipo de prendas: “calidad, diseño y precio”.

En el año 2013 Mari Carmen pasó el testigo a su sobrina Teresa quién con el ímpetu de su juventud y ganas de seguir proyectando los resultados de su fundadora sigue desarrollando las tres importantes constantes claves del éxito de Creaciones Ana. Actualmente adaptándonos a las exigencias que nos vienen solicitando, hemos creado esta página web para acercarnos un poquito más a vosotros y vosotras además de otorgaros mayor comodidad a la hora de adquirir nuestra ropa.

Teresa a pesar de creer que no habrá relevo generacional, se siente feliz al ver que la actividad que nació en 1975 continúa recogiendo su fruto.

 

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